ALGUNAS CONSIDERACIONES IRRESPETUOSAS AL HECHO EDUCATIVO

Si la educación es la responsable de lo que el ser humano hace en el presente, debemos poner en tela de juicio sus alcances y tratar de no comprenderla bajo los lentes de engaño que ella misma fabrica.¿Qué tipo de ser humano se ha logrado formar en la actual sociedad? Quizás sería una pregunta pertinente, pero enseguida me percato de que en ella hay una orientación, hay una trampa, se hace presente la fuerza del sistema educativo; la generalización. Parto de creer o dar por cierto de que sólo hay un tipo de ser humano creado o formado por el sistema educativo, me corrijo entonces, ¿Qué tipología de ser humano ha creado el sistema educativo actual? tampoco sería una pregunta adecuada, porque en ella se evidencia las limitaciones del conocimiento, tendríamos así una polaridad que encausa nuestras reflexiones: generalización y limitación. En cierto modo la primera es consecuencia de la segunda. Todos nuestros conocimientos son parciales, son limitados, por la sencilla razón de que el instrumento que conoce, el pensamiento, la racionalidad y el lenguaje son parciales en relación a los llamados objetos de conocimientos o susceptibles de ser conocidos. La generalización además, ya lo he hecho en otros ensayos (La raíz en las ramas, 2007) debe ser desnudada como arma de manipulación y control del conocimiento, como instrumento de dominio que, entre otras cosas, sirve para borrar los rostros, abstraer las identidades, desfigurar las realidades sociales y culturales. Generalizar es una confesión de impotencia ante el enigma que yace dormido en lo que los físicos actuales han optado por olvidar o dejar de lado o no darle importancia: la realidad o las realidades. Sólo el conocimiento poético puede rebasar las limitaciones de la razón, Bhor, constatando esta verdad, afirma que en la física subatómica sólo se puede hablar en términos poéticos. A ello le podemos añadir las exigencias de sencillez estética que se le pide a la teoría o a los modelos que se generan para dar cuenta de esos fascinantes mundos donde lo inmaterial es reconocido como parte integrante de lo material.

Otros esfuerzos podrían llevar a otros resultados, siempre hay una cuota de incertidumbre que nos pone a dudar tanto del procedimiento como de los resultados obtenidos con él. Siempre cabría preguntarse, si hubiesen sido otras mis lecturas, otros los hallazgos anteriores, otros los instrumentos, otro el tiempo de aplicación o de investigación, qué habría ocurrido. El devenir casi siempre responde a esto profundizando, trastocando, negando los alcances anteriores. Sólo se evidencia las limitaciones del sujeto que conoce.

La ciencia, en sentido estricto, es una manera “oficializada, socialmente aceptada” de imponer el pensamiento único, desde hace mucho tiempo nosotros negamos las visiones del indígena o de los asiáticos o del mundo mágico religioso. No creemos que haya vida después de la muerte, así todas las civilizaciones del planeta lo hayan dicho, lo hayan representado. Es imposible que un ser educado bajo las visiones castrantes de la ciencia crea que las matas son puertas a otro mundo o posean dentro de ellas los espíritus de la sabiduría o sean los peldaños más inmediatos para amasar la humildad. La ciencia educativa es poderosamente eficaz, logra imponer la certeza lógica y esto no es nada ocioso, no es nada beneficioso. En mi caso, prefiero vivir en lo incierto, en lo no sabido, en el asombro. Pero la lógica es la punta de espada que el pensamiento occidental penetra en nuestras comprensiones cotidianas para desaparecer de las habitaciones de nuestras certezas a las ánimas…

EL DESTINO DE LA CASA

21 enero, 2011

 *

la casa apaga

el ahora de las lámparas

y la tibieza de los pasos en sus baldosas

 *

nadie llega a disminuir las distancias

abatidas en las puertas

ni a pintar la angustia fundada en los rincones

 *

todavía la acacia luce la altivez

de cuando sirvió de escondite

a nuestras infancias

y vagan mis maromas en la erosión de sus ramas

 *

esta casa se abre para atrapar nuestro silencio

porque ya andamos a tientas por las cosas

sintiéndoles el paso de corazón

 *

cómo esquivamos los signos de despedidas

que cada presente esculpe en el aliento de la casa

y graba en plena distribución de las paredes

un destino de intemperie

 *

mi casa se

dobla hacia el rencor

de los objetos que se quedaron

sin la filiación de sus dueños

 *

algo falta en su longitud

algo desconcha su textura

 *

los mismos habitantes que le faltan a mi cuerpo

las mismas sombras que dentro de mí

insisten en prender los bombillos rotos

y echan las bases de una casa de ausencia

ARAÑA

21 enero, 2011

yo caí en el medio del camino

y la araña corrió hacia mí

sacaba latidos y angustias

un patio rezado mis cuentos

 *

la araña no tiene cautela

sabe que su tela es fuerte

y enreda y enreda

 *

quito unos hilos y nacen otros

sacaba regazos retazos de risas

pájaros de almohadas mis versos

 *

la araña no tiene compasión

atrapa el cuerpo

y enreda y enreda

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

CASA NACIONAL DE LAS LETRAS ANDRES BELLO

SISTEMA NACIONAL DE TALLERES LITERARIOS

LIC. VICTORIA ARDITO

PRESENTE

INFORME

 

Datos de la institución donde se impartió el taller de poesía:

Nombre: U.E. Andrés Bello

Dirección: Carretera panamericana, sector Sanguijuela, parroquia Urama, municipio Juan José Mora.

Directora: Lic. Elsa González. Teléfono: 0416-3406708

Maestra responsable: Rosemy Aguilera. teléfono: 0426-9495338

Facilitador: Arnaldo Jiménez.

Tiempo: quince sesiones de tres horas cada, 45 horas en total.

Descripción del taller por día:

 

Martes 28-04-09

– Dinámica. Pobrecito de Mateo.

– Diagnóstico: sondeo en torno a nivel de trabajo previo con el texto poético.

Nota: los estudiantes pertenecen a zonas rurales en su mayoría, provienen de familias con muy poca valoración del libro como bien social. En la escuela el trabajo con el texto poético ha sido casi nulo, tienen graves problemas de ortografía y muchos leen de manera pre-silábica. Hay dos hermanos que presentan retardos leves. Dadas las características de la Escuela, no funciona en el turno de la mañana el cuarto grado, por lo que se hizo difícil que acudieran en un turno contrario al de sus estudios, aún así logramos reunir 20 estudiantes.

El trabajo fue arduo, porque no conocían ningún poema ni ningún autor. Comencé por obsequiarles varios textos, y las primeras sesiones la dedicamos a leer y a comentar lo leído. Aunque hay muchos poemas que pueden ser aceptados como buenos, hay otros que son pobres en sus alcances líricos o literarios. Al final del taller, después que el compás de confianza alcanzó niveles más estrechos, varios de los estudiantes manifestaron haber ido al taller obligados por la docente; pero que a ellos no les gusta la poesía. Lo que no quiere decir que no hayan aprendido las enseñanzas que en el taller se imparten, esto es; la importancia de la concentración para obtener logros en lo que se hace, y la importancia de la lectura en la ampliación del vocabulario y como instrumento para expresarse libremente.

 

Jueves 29-04-09

– diferencia entre poesía y poema.

.- lectura de poemas: décimas para acercarse al universo. Comentarios

Martes 05-05-09

-Ejercicios de desarrollo de la atención.

– rifa de libros.

-lectura de poemas: Canta pájaro lejano.

 Jueves 07-05-09

-conversación en torno a los libros leídos

– lectura de poemas. Canta pájaro lejano

-lectura de poemas :Remiendos de media luna.

Martes 12-05-09

-conversación a los poemas leídos en casa.

– lectura de poemas indígenas venezolanos

-comentarios.

Jueves 14-05-09

-repaso de todo lo visto hasta la fecha: intervenciones orales.

– Rifa de libros.

-Lectura atenta de poemas de Juan Ramón Jiménez y Luis Alberto Crespo.

-Conversación: El placer de escribir.

Martes 19-05-09:

– Musicalidad y ritmo en los poemas.

– Las fuentes de los poemas: la vida y la lectura.

-Charla: escribir es un ejercicio de libertad.

Jueves 21-05-09

– conversación en torno a la charla anterior

– producción de textos escritos por parte de los asistentes al taller

-lectura de los poemas.

Martes 26-05-09

– Lectura atenta de poemas de Humberto Ak’abal, conversación.

-lectura de poemas del libro El silencio del agua.

– Escritura de poemas por parte de los y las estudiantes.

– Conversación en torno a los poemas escritos por parte de los y las estudiantes.

Jueves 28-05-09

-Lectura y conversación en torno a los poemas del libro El silencio del agua, tratando de ver cómo otros niños escriben poemas, los temas y las comparaciones.

-Escritura de poemas con temática libre por parte de los y las estudiantes.

Martes 02-06-09

– Lectura atenta de poemas de Antonio Trujillo  Ramón Palomares.

– Conversación en torno a los poemas.

– Escritura creativa: escribir dos significados diferentes de un mismo texto poético.

Jueves 04-06-09

-Lectura de poemas.

-.conversación en torno a los poemas.

-Escritura de poemas por parte de los y las estudiantes

-dramatización de uno de los sueños de Akira Kurosawa.

Martes 09-06-09

– Ejercicios de escritura creativa: los niños y niñas cerrarán sus ojos haciendo un máximo esfuerzo de concentración, se le leerá un poema corto, despacio, varias veces, luego los niños y niñas escribirán lo que imaginaron y realizarán un dibujo alusivo.

– Rifa de seis poemarios: Tramos de lluvia, de Arnaldo Jiménez.

Jueves 11-06-09

-escritura de textos poéticos por parte de los y las estudiantes

– conversación en torno a lo escrito

– el arte de podar poemas

Martes 16-06-09

– conversación en torno a los conocimientos más importantes adquiridos durante el taller.

-escritura de poemas

-lectura de poemas, compartir.

POEMAS

 

1

las flores tienen

varios colores

son arco iris

sembrados

2

el viento sopla

como los humanos

respiran

3

cuando nosotros

nos bañamos

soltamos todo

lo que llevamos

encima

y todo lo que

llevamos por dentro

Eila Busato, 5to grado

4

hay un espejo

a través del sol

no lo conozco

sólo gira

5

el sol es igual

a la madre

a través de la vida

Dafnis Villegas,  5to grado

6

creciendo hasta ponerse delicado

hasta morir

y después hincharse

y después volver

a hincharse

7

un pájaro me mira

y no sé que tiene

si está roto

o si se quiere ir

Gabrys Matusalén, 5to gardo

8

el cuerpo

se deshace

el cuerpo

anda con sombra

anda con luz

9

una flor

quiere quedarse

abierta

para siempre

pero no puede

Fabianna Mendoza, 6to grado

10

el girasol

mueve

el profundo silencio

del jardín

11

el diario

ayuda

a las personas

que sufren

12

se desaparece

como el polvo

entre los

dedos

como una brisa

que se va

y se va

Rafael Alvarez, 6to grado

13

el dragón

de fuego

es del color

del hielo

14

el caballo

llora

como una persona

cuando

se le va su amor

15

la luna alumbra

los caminos

del señor

José Yoel Pinto 5to grado

16

la estrella

es algo importante

porque

alumbra

a todos

17

la escuela

alumbra

como una estrella

pero de día

Henrry Mollega( Niño especial) 5to grado

Nota: el niño escribió su poema y luego lo leyó, fue entonces que yo tomé nota de lo que decía.

18

la gandola

arde fuerte

en mí

19

una nube desaparece

y sigue

brillando

la mañana

Israel Pérez, 5to grado

20

el pájaro

inspira

una emoción

que nos ayuda

porque nos da

entusiasmo y recuerdos

21

todos los seres se hacen

polvo

a veces no sabemos

que la muerte

nos está siguiendo

somos como

melón

que se deshace

sin saberlo

Rosmery Días, 6to grado

22

hay cristales

en las flores

cariños

en los padres

aunque no se vea

23

la rosa no puede

bailar

por eso espera

la lluvia

24

se pierde

se rompe

se va

se pierde

25

en el cuerpo

se trasnocha

el polvo

Luís David Jaramillo, 5to grado

26

el cariño es un trébol

de cuatro hojas

difícil

de conseguir

27

la vida es el juego

donde se lucha

para seguir

viviendo

Aduannis Borges, 6to grado

28

el caracol es lento

con la muerte

inesperada

29

las nubes

se llenan

con las lágrimas

de nosotros

30

la madera es como la luz

dura

grande

y suave

porque también

tiene un secreto

Eddalis Mollega, 5to grado ( esta niña presenta un retardo mental leve)

31

el barco de la vida

navega y navega

hasta que la madera

se pudre

32

 la papelera

absorbe y absorbe

hasta que se desangra

33

la mente es un

borrador

que puede borrar

muchas cosas

buenas y malas

34

las nubes nos dan

muchas imágenes

como la luna cuando

gira

alrededor

de nosotros

Junior Alexander Acosta, 6to grado

35

el cuerpo parece

un cigarro

se apaga

y se enciende

en otras manos

36

las nubes

tienen formas

de matas

y las matas

formas de noche

Rosbelys Camacaro, 5to grado

37

cuando nací

también nació una flor

cada vez que yo crecía

crecía la flor

la flor estaba en el jardín

un día fui a verla

y se levantaron todas las flores

la conseguí

era un girasol

cada vez que me iba a acostar

la flor me echaba brisa

como un ventilador

38

el espacio se mueve

como mis pasos

nunca se está quieto

me persigue

Kerlys Martínez 6to grado

39

las arenas

a veces son aguas

que encontraron 

donde estar

40

las semillas

nacen

de otra cosa

diferente

Wuilismer Salas,5to grado

41

la rosa es roja

como un

poema de

sangre

42

en la escuela

quedan

los recuerdos

apareciendo

como fantasmas

43

el piso

tiene

todos los pasos

de mi familia

Roxana Andreína Cadenas, 5to grado

44

el cable es como

la vida

largo

nunca se acaba

45

las flores

abren

en el silencio

del jardín

Hender Villena,6to grado

46

las lágrimas

de un sol

caen

sobre el atajo

47

el primer

canto

de la sabana

se aproxima

48

la razón es un edén

hasta

la mariposa

desearía tenerla

Luisa Santana, 5to grado

EN LA YEGUA DE MARIA

16 enero, 2011

 

¡Shhhh, Julio se quedó dormido!

Decía la abuela María cada vez que mecía al nieto en su mecedora, pues a julito le gustaba dormir allí, no rechazaba la cuna, pero sólo se podía quedar dormido en la mecedora de la abuela María. Ella lo acostaba sobre una almohada que colocaba en sus piernas y lo mecía a derecha y a izquierda con mucho ímpetu, mientras canturriaba bajito una canción de cuna y con sus arrugadas manos le daba palmadas en la espalda. Sólo el cariño podía hacer que la abuela, a pesar de tener una pierna muy gorda y casi negra como la de un hipopótamo, no le importara las molestias y meciera a julito como ella lo hacía. La fuerza iba disminuyendo en la misma medida en que julito se iba quedando dormido. Dibujaba una sonrisa en la boca, quizás soñaba estar montado sobre una nave poderosa que lo llevaba hacia lugares increíbles, pues la canción que más le cantaba la abuela decía:

en la yegua de María

un día me monté

y llegué a un sitio muy hermoso

que nunca imaginé

en la yegua de María

no existe la soledad

porque el amor de ella

es agua de música

que se puede tocar

Los meses transcurrían y la abuela María se enamoraba cada día más y más de su nieto. Todas las noches se lo acostaba en las piernas sobre una almohada, murmuraba canciones de cuna que iban cerrando las cortinas del mundo despierto de julito hasta que se quedaba completamente dormido. Después ella se iba a su cuarto a descansar la pierna enferma.

Julio creció, ya podía caminar y decir algunas palabras. Cuando la abuela cantaba él le acompañaba mascullando las canciones y diciendo sobre todo las últimas sílabas. La abuela María lo sentaba en el mecedor y le contaba largas historias de sus hermanos que en un tiempo fueron marineros y vivieron muchas aventuras en el mar y en otras partes del mundo. Entonces el mecedor era una barca muy fuerte que aguantaba los grandes oleajes y las violentas tempestades del mar. Allí la abuela le decía, “…,ahora imagina que tú eres el capitán y tienes a tus órdenes a muchos hombres”, y julito cerraba los ojos y rodaba su película imaginaria y se reía solo. En el fondo de él, sin embargo, seguía sonando aquella leve melodía que la abuela le cantaba para que él se durmiera; caprichoso, volvía a pedirle que se la cantara, la abuela le decía, “está bien julito vamos a cantarla, ¿quieres ayudarme a cantar?” Y él afirmaba meneando la cabeza muy emocionado.

en la yegua de María

ena ebua e maía

un día me monté

un lía e onté

y llegué a un sitio muy hermoso

yeeé a un itieooso

que nunca imaginé

que uca iaiiné

en la yegua de María

ena ebua e maía

no existe la soledad

no eeite a oead

porque el amor de ella

oquee aor eella

es agua de música

e gua e sica

que se puede tomar

quee quee omar

después se bajaba de la yegua de María y andaba contento para todas partes. Julio la escuchaba con atención y reía y la abrazaba cada vez que ella terminaba de contar sus historias y de cantarle su canción. Sólo ellos sabían el verdadero nombre de la mecedora. La abuela María cada vez arrastraba el pie izquierdo con más dificultad, lo tenía ancho y casi negro como el de un hipopótamo, una venda blanca le adornaba la rodilla.

La abuela María en sus horas de descanso se sentaba en la yegua para inventar las historias que luego le contaría a su nieto. Siempre eran primos o tíos que se iban a navegar a sitios muy lejanos y lograban vencer grandes obstáculos. En la yegua de María el recuerdo se mezclaba con el invento y el olvido crecía como un pasto que no se debía comer y era peligroso pisar. Muchas veces la abuela también se quedaba dormida.

Siguió pasando el tiempo y julito ya iba a la escuela, tenía diez años, y el cariño entre su abuela y él era cada día más grande y más profundo, como el mar donde sus primos y tíos pasaron sus aventuras. La mamá le cocinaba mientras él arreglaba las cosas del colegio, después de comer se echaba un baño y se iba a buscar a su abuela al cuarto.

Con grandes esfuerzos, la abuela se sentaba en la yegua de María. A julito no le importaba ser visto por sus amigos y más de una vez soportó sus bromas en silencio. Se montaba sobre ella y la abrazaba, y ella contaba sus historias, algunas entremezcladas porque ya no tenía tiempo de ponerse a inventar debido a que el pasto del olvido estaba más y más frondoso. Luego cantaban, como siempre, la canción por ambos preferida.

Una tarde llegó julito del colegio y fue a buscar a su abuela en el cuarto para que ella le cantara la canción de cuna con que lo hacía dormir cuando él estaba más pequeño. La abuela lo vio y sonrió, le pidió ayuda para levantarse de la cama, pues la pierna izquierda se había ennegrecido completamente y apenas podía moverse la sangre por dentro de ella. Julio estaba muy sorprendido y le preguntó a la abuela que qué le había pasado a su pierna gorda, que estaba más negra que antes y sudaba pequeñas gotas de sangre. La abuela lo miró con ternura y le dijo que a las yeguas a veces se les echa a perder una pata y que esa pierna de ella ya no quería seguir caminando, estaba cansada de ir de un lado a otro. Volvió a sonreír y le dijo que no se preocupara. La mamá de julito se alistaba para ir a la farmacia a comprar unas medicinas, pero decidió ayudar al hijo a llevar a la abuela hasta la mecedora. Cuando llegaron a la yegua, se le acercó al niño y le murmuró casi al oído que tenía que tener más paciencia con su abuela, que tratara de no molestarla mucho porque ya su pierna estaba muy pesada, que a veces esas cosas ocurren con la vejez. Luego se dirigió a la puerta y se fue a hacer sus diligencias.

Cuando iban marchando por el pasillo al ritmo de la pierna buena y la pierna mala, la abuela se fijó en la yegua de María y vio que tenía un aspecto muy extraño en su cara, estaba como mojada, y el pasto que crecía a su alrededor había sido completamente devorado. Entonces ella comprendió qué estaba ocurriendo y se sentó en la mecedora y trató de contarle nuevas historias a julito, pero no se acordaba, ni siquiera podía mezclar las que ya se sabía.” Hace mucho tiempo…,” decía, pero de ahí no pasaba. Entonces la abuela le dijo a julito que no se acordaba de nada, que todos sus esfuerzos no daban resultados, y musitó un breve bostezo lleno de pesadumbre. No se preocupe abuela-dijo julito- seguro que las medicinas la ayudan y mañana ya se va a poder acordar-. Entonces le puso un cojín a nivel de la nuca para que descansara la cabeza. Luego, tratando de no hacer bulla, fue a buscar una silla para sentarse al lado de su abuela, esta lo vio por la rendija de los ojos adormilados y le hizo señas con las manos para que no lo hiciera, golpeó sus piernas, dos, tres veces para que julito se sentara en ellas. Julio entendió y lo hizo con mucho cuidado, tratando de que todo su peso cayera en la pierna buena, uno de sus brazos quedó por fuera de la mecedora y posó su rostro sobre los senos de la abuela, justo debajo del mentón. Le pasó los dedos por las abultadas venas de las manos y las acarició, después comenzó a cantar la canción preferida de los dos, la abuela apenas escuchó el inicio se fue acordando y lo acompañó:

                                     en la yegua de María   

un día me monté

y llegué a un sitio muy hermoso

que nunca imaginé

en la yegua de María

no existe la soledad

porque el amor de ella

es música de agua

que se puede abrazar

y la abuela lo abrazó contenta y le dio un beso en la frente y en los carrillos, luego elevó la mirada corriendo sobre su yegua, dibujó una amplia sonrisa, se bajó de la mecedora y llegó a un jardín muy hermoso que recorrió saltando de alegría con sus dos piernas sanas. Frente a ella se encontraba la Virgen María con su hijo sentado sobre la yegua, estaba tratando de dormirlo, cuando la vio, le hizo señas para que se acercara, ella fue, acarició al niño y se arrodilló ante él, en ese momento su memoria se llenó de tiempo y comenzó a contarle sus maravillosas historias:

¡Shhhh, Julio se quedó dormido!

Decía la abuela María cada vez que mecía al nieto en su mecedora…

                                                              

 

                                                                     arnaldo jiménez

LA ESCUELA COMO FABRICA

16 enero, 2011

 

 

            La escuela como fábrica: HE ALLÍ UN RETO. La escuela produce seres en series, moldes de individuos aislados y aislantes, adoradores del dinero, personas para quienes la piel es un límite y no un borde de prolongaciones y contigüidades; no un ser que tiene una ritualidad de pertenencia al espacio inmediato de vida, no un colectivo en cada ser, sino una isla en cada persona. Toda pleitesía a la escuela concebida en estos términos es al mismo tiempo una reproducción del sistema capitalista en sus más íntimos valores: adorarás al dinero por encima de todas las personas, usarás los vestidos del capital y creerás que constituyen tu propio ser. La escuela como subsistema del sistema económico y político capitalista también funciona con el mismo sentido de las fábricas, los ecos de esta relación provienen desde el nacimiento mismo del sistema capitalista cuando en Inglaterra los primeros empresarios contrataban niños desde los siete años quienes eran amarrados a las máquinas para que no las dejaran solas ni se distrajeran jugando, a muchos de ellos le limaban los dientes para reducir la cantidad de comida ingerida y menguar la sensación del hambre. Indudablemente que esta imagen, cruel, real y grotesca de las fábricas ha cambiado en el tiempo, pero nos ilustra suficientemente las vinculaciones entre los diferentes engranajes de un sistema, el acoplamiento entre los subsistemas, nos ilustra suficientemente la relación entre el aprendizaje y la estructura económica: es preciso transformar la materia prima del ser humano, su cuerpo en deformaciones y enfermedades, su alma, privándola de la libertad de ser. El sentido, la dirección de la producción dentro de la escuela no ha cambiado, sigue siendo el mismo, la reproducción de un molde de la subjetividad que se adose a los requerimientos del sistema y lo reproduzca, ya no dentro de los esquemas formales del aprendizaje, sino fuera de ellos; el ser humano es convertido en una propaganda andante, un eslogan viviente del sistema de cosas en el cual se desenvuelven sus deseos y sus frustraciones. La industria sigue buscando su utopía, salir del salario, hacer depender su existencia ya no del hombre sino de la robótica, de la tecnología; eliminar la presencia de las pasiones y de las necesidades dentro de sus límites.

Entra una materia prima, digamos que el niño o la niña: un ser que viene de un aprendizaje basado en lo emocional, lo afectivo; grandes hazañas realiza el niño dentro de la casa, caminar, hablar, oír, reconocer y ser reconocido, incluir su afectividad en la circulación de las emociones que de una u otra manera forjan su identidad dentro del hogar; es un ser que para elevarse como humano necesita del otro y de lo otro que es la naturaleza y la sociedad, pues los padres son representaciones de ese binomio imbricado e inseparable. Esta materia prima se vuelca hacia fuera para construir su adentro, con un sistema perceptivo abierto que lo impulsa a comunicarse con los demás, no sólo a través de palabras plenas de sentido, sino con su cuerpo, con su calor, con los tonos de las cercanías, pues el niño o la niña son seres grupales, son seres colectivos. En las sociedades indígenas el tamaño del grupo estaba, y aún lo está, conscientemente calculado, porque de este modo los controles del poder colectivo, los rituales de pasaje y las relaciones con los dioses pueden ejercerse con mayor eficacia, se garantiza además la reproducción de las subjetividades colectivas y se mantiene la historia y la identidad del grupo étnico en cuestión, el niño o la niña es aceptado como miembro de un grupo mayor a la familia a través de los ritos de pertenencia; allí el cuerpo es la hoja donde se graba esta adhesión, esta ley de ser y de estar. Pero en nuestras sociedades las familias se encuentran con espacios de socialización muy amplios que no permiten un control tan efectivo de las personalidades en el sentido de que el individuo no se aliene del grupo social; la escuela tendría ese papel, el de adherir a las personas al sistema en el que viven y, la escuela capitalista lo logra eficazmente, lo realiza cabalmente, sólo que este espacio de socialización reproduce no a un grupo, ni a una colectividad en valores como la solidaridad, la cooperación, etc. valores que el hogar enseñó inevitablemente, porque si estos fuesen los valores de pertenencia estaríamos en presencia de una escuela que no reproduce la ética y la moral capitalista: la competencia, el egoísmo, el individualismo, sino una que reproduce la ética y el poder difuso de las etnias indígenas, sobre todo las que han sobrevivido en Suramérica.  A la escuela entra entonces materia prima grupal y sale materia elaborada individualista. ¿Cómo llega a ocurrir esta deformación o esta producción de la deformación? Pues, la única manera es que la mercancía esté presente también en las relaciones extra e intraescolares, que allí prevalezca la alienación de nuestras potencialidades y éstas sean absorbidas por el famélico hocico del capital.

            El yo se forja como una extensión social, es un puente entre el individuo y lo social, si el ser humano quiere afirmarse como tal tendrá que sortear los avatares y los recovecos de esta relación que le permite su existencia; el yo es otro, decía Rimbaud. Estamos en presencia de un ser que al aprender a convivir construye al mismo tiempo su definición en una impropiedad, el ser humano no se pertenece, es una comunicación en permanente movilización de personalidades, su encadenamiento a lo social tiene dos órdenes, el del lenguaje y el del afecto. La escuela capitalista forma para hacer de la verdad una ilusión: la tenencia de la propiedad, el respeto a la misma, que es el fondo que subyace en la dictadura del mercado. La propiedad privada sin embargo, es la esencia del mal en el planeta, por ella la ley y su violación, por ella la defensa y el combate, por ella el “desarrollo”de los medios de destrucción, por ella la mentira hasta la escala del horror: el dinero es la expresión concreta de la propiedad y nuestra obsesión por él  una muestra de inmadurez histórica y personal, la cosa robándole los valores al ser, determinándolo, la mercancía se mantiene con nuestra sangre; la crueldad del sistema descansa en una ilusión. Todo lo rige la ley del mercado, orienta cada sistema y subsistema, y la escuela no escapa de ello.

La ley del mercado tiene como base la ruptura de los lazos de cooperación entre los hombres, pues toda relación social está mediada por el dinero y este impone y modela todos los valores. La escuela se sumerge en esta ley, y al igual que toda industria capitalista, también fabrica el aislamiento, produce individuos en series. Por tanto, toda la escuela, en cada una de sus partes, se engrana hacia la misma finalidad: reproducir el tipo de hombre que necesita el mercado, un ser que no se piense en otro esquema social ni productivo, un ser que sólo pueda concebir su existencia en el marco de una sociedad consumista y depredadora; consumir para poder ser, acumular para poder satisfacer. Un ser que pierde sus acciones de compromiso y responsabilidad con los otros y con la naturaleza, su otra parte.

 Un salón de clase reproduce a pequeña escala todo el funcionamiento del mercado y el sentido de todas las orientaciones sociales: un grupo de personas se relacionan convirtiendo sus necesidades en intereses y estos conllevan la conversión de las capacidades creativas en puntuación, es decir en calificar, clasificar, moldear, competir, premiar, cambiar. Las expresiones del saber, que son expresiones de libertad, son rebajadas y ofendidas al hacerlas formar parte de la distribución y reproducción de lo valores esenciales del sistema capitalista. Es por ello que el ser humano en esta sociedad casi no encuentra respuestas a las preguntas por su existencia, el sentido de vivir, el por qué y para qué de la misma, no hay un ordenamiento cultural que le abra causes a estas búsquedas, pero lo más grave es que el “avance” tecnológico en informática, microelectrónica, telecomunicaciones, etc. genera un ser humano que ya ni siquiera se hace esas preguntas, que ya no se angustia, que no sufre metafísicamente y no padece filosóficamente; las urgencias de la vida se reducen a no tener, a no poder consumir o a desear objetos. Casi no se vive

La medición es la presencia de la mercancía dentro del salón de clase, una expresión más del valor de cambio, la comunicación allí está rota, no es humana a plenitud, no se crean lazos de amistad sino lazos comerciales que a la vez son lazos de poder. La cantidad tiende a reinar sobre la cualidad.

El marco general de la incomunicación en la escuela sólo puede ser resuelto haciendo implotar su funcionamiento tecnocrático, gerencial, destruyendo la presencia del capital en sus formas más destructivas, liberando el saber de las trabas mercantiles, introduciendo un modo de enseñar que esté guiado por la preocupación de crear un ser humano libre, comprensivo de su ser cósmico, social, natural y cultural, un ser preocupado por fortalecer sus capacidades espirituales que se traducen en una mejor adaptación a las situaciones externas o materiales. La libertad en el proceso y en la meta.

con un ramito

5 enero, 2011

 

con un ramito de agua

retoño de un pájaro

compongo mi tristeza

*

 

con un pueblo en su canto

plumaje de espigas

renazco de mi alegría

*

 

con un ramito de peces

sus anzuelos en mi alma

detengo mi hastío

*

 

con un rayito de luna

deslizada por dentro

borraré el color de mi noche

*

 

con un poquito de calma

escucharé lo que mis piedras

hablan en silencio

*

 

con un ramito de mi cuerpo

encontraré otro jardín

cuando me vaya con el río

 

ENCUENTRO CON EL AGUA

5 enero, 2011

mi hija trepa el extravío del aire

su piel bautiza los callos de mis miedos

abre la sonrisa

y un susto de luz me moja por dentro

comienzo a olvidar las sentencias

de mis sucios

navego de regreso a los disfraces

de mi vergüenza

el jabón de su cuerpo limpia mis manos

y lo dejo en espera de otras edades

hasta que la recurrencia de vestir

con palabras a su cuerpo

le hagan perder la comunión

entre la desnudez y la mirada

LAS EXPOSICIONES

5 enero, 2011

 Arribamos a una de las evaluaciones más perversas que puedan existir en los medios educativos de la escuela básica, las exposiciones. Es una derivación de los trabajos de investigación, de los cuales no hemos dicho aún todo lo que deberíamos haber dicho. La razón más poderosa que se esgrime a su favor es que ayuda a los estudiantes a perder el miedo escénico. ¿Hay alguna otra ventaja? Creo que ninguna otra. Veamos de cerca qué es eso del miedo escénico. Como su nombre lo indica es miedo a salir a la escena, de presentarse en un escenario. Es decir, que dentro de esta frase se encuentran varias razones ocultas, agazapadas, que también esperan por salir del camerino y mostrarse. Primero, la frase afirma que educar o enseñar implica una escena, un montaje donde una persona le hace creer a un grupo que asisten a oírlo que él sabe algo que puede enseñar, en el fondo hay una base de creencia, esto puede o no ser así. Si el que está ejecutando el papel de maestro lo hace bien, puede ser que no sepa nada, que no haya convertido su vida en un motivo de enseñanza, pero puede convencer al grupo de que sí sabe algo. Sin embargo, esta impostura, esta mascarada, no impedirá que el grupo no aprenda de él o de ella. Los actores que hacen papel de maestro utilizan varios efectos especiales para desaparecer en pleno acto, uno de los efectos más usados es la llamada exposición, en qué consiste, en delegar su trabajo a los alumnos. Los estudiantes preparan un tema que sea vinculante con la materia o sea parte de ella, se estudian unos puntos que se han repartido a partir de la formación de equipos y luego elaboran un trabajo que es una especie de ensamblaje. Cada quien se estudia uno o dos puntos. Fijan la fecha para exponerlo al resto de los equipos y al docente. Los estudiantes pasan por la peor de las experiencias, sudan frío, se le hiela las manos, titubean, se paralizan, bailan una danza nerviosa que raya en el piso su frenético vaivén, parecen locos que ven hacia zonas perdidas diciendo una y otra vez: verdad, verdad, este, eh, eh, verdad, entonces, entonces… Pero estoy seguro que todos estos signos aluden a que los estudiantes no saben que están actuando, se creen el papel de maestros o de estudiantes de verdad,  lo encarnan, lo padecen.

Todo ello lo pudo evitar el director de la obra, el docente, precisamente acudiendo al teatro para erradicar el miedo escénico, es como más lógico, es como más adecuado. Los estudiantes perderán el miedo escénico actuando, a mi juicio no hay otra manera más efectiva de hacerlo. Quizás ganemos mucho más con la aparición de buenos actores.    

 

En todo caso tendríamos que enseñar a nuestros estudiantes a  interrogarse, a dudar, a problematizar lo evidente. El arte de hacerse preguntas es el ejercicio mismo de la filosofía. La filosofía, ¿por qué está ausente en la escuela básica? ¿A qué se debe que en este nivel vienen a parar todos los productos finales del conocimiento en forma de esquemas, de preguntas harto fastidiosas, de programa en forma de objetivos? La búsqueda del por qué, volver al para qué ocurre algo, nos daría una orientación social y política de gran responsabilidad. Al fin y al cabo, cómo puede aparecer un investigador si no hay antes las condiciones necesarias y suficientes para incentivar el espíritu investigativo, la curiosidad por el saber, la ampliación del pensamiento. Es por ello que en muchas ocasiones he planteado la necesidad de orientar todas las materias al ejercicio que haga posible la aparición del pensamiento autónomo. Si para lograr ello hay que desaparecer materias inauditas e innecesarias, tendríamos que establecer un consenso para hacerlo. En algunas entregas de esta columna, de manera humilde y sencilla, he sugerido que a todas las materias se les coloque el rótulo de lectura comprensiva mención geografía general, artística, historia, etc. Para que no se crea que se quiere eliminar de un tajo el programa basado en la memoria. Sería mucho más conveniente enseñar a nuestros alumnos a escribir ensayos. Recordemos que el ensayo es una opinión que da el autor sobre un tema determinado, un tema de su gusto, no es tanto el objeto sobre el cual se va a hablar si no el modo de cómo el autor lo aborda, así se podría ejercitar el estudiante en el arte de pensar, indagar, manejar recursos literarios como la ironía y la duda.

Me gustaría que en vez de colocar a los estudiantes una tarea que ni siquiera en la universidad se lleva a cabo con agrado, se le enseñe la pasión por pensar, el gusto por descubrir  relaciones entre diferentes elementos de lo real. Se le enseñe a ver el mundo inmediato de vida. Me gustaría que los estudiantes se interroguen sobre sus condiciones de vida, que a la vez son condiciones humanas y se converse sobre sus causas y sus consecuencias en una ronda de saberse personas inmersas en un contexto social, cultural e histórico determinado. Qué significa en términos de vivencias cotidianas el subdesarrollo, la dependencia. Cuáles son las opciones que tenemos ante esa realidad. La investigación no es pues una nota más, cómo no debe serlo ninguna de las enseñanzas que tocan profundamente nuestra sensibilidad como ser humano, es una condición de vida, una vía para aprender a pensar.

Para llegar a establecer los esquemas metodológicos que pudieran servir para encuadrar la realidad y conocerla, hace falta comprender los avatares que ha pasado el lenguaje para deslindarse en dos grandes vertientes, el lenguaje literal y el lenguaje figurado. La ciencia es hija del primer tipo, algunas corrientes literarias y del arte en general también lo son, el realismo y el paisajismo por citar dos ejemplos. La poesía,  que según Lautremont, constituyó el primer lenguaje humano, imbuido de metáforas y transformaciones, lenguaje poético que dio origen al mito y a las religiones, es heredera del segundo tipo, la filosofía también sería una derivación del lenguaje figurado y su poder de reflexión. Es preciso que esto se les explique con suficiente claridad a los alumnos, para que ellos se ejerciten en los dos modos de conocimiento que tales lenguajes acarrean o contienen dentro de ellos. 

Los dos lenguajes a través del tiempo han tenido relaciones de forcejeo basadas en el menosprecio recíproco; el lenguaje literal aspira ser un lazo identitario que supone la correspondencia entre la razón cognoscente y lo conocido o el objeto susceptible de ser conocido. Este juicio de verdad, estaría despojado, en el caso del método científico, no sólo de las pasiones del sujeto, de sus creencias y gustos, si no de la capacidad del lenguaje por desprenderse e inventar sus propios referentes. De tal manera que el proceso de investigación es al mismo tiempo un proceso donde el sujeto desaparece, de allí la exaltación de una de sus características más representativas: la objetividad. Lo objetivo es aquello que ha sido analizado tal cual es, el realismo ingenuo mantenía la tesis de que la realidad habla. La historia de la ciencia se ha encargado de resquebrajar estos saberes que fueron los pilares del método científico hasta principios del mil novecientos cuando la teoría de la relatividad comenzó un movimiento de desestructuración epistémica de la ciencia, aquellas categorías como sujeto, objeto, realidad, verdad, se tambalearon y se han caído estrepitosamente. ¡Por qué dejar a un lado este sismo? Cómo ignorar que la entrada de Einstein al universo de la ciencia es la transformación de su lenguaje, supuestamente univoco e inequívoco, en un lenguaje flexible, lleno de imaginación, invadido por la metáfora, muy parecido al lenguaje lúdico de los estudiantes, lo cual nos ofrece el ápice por donde podríamos comenzar a transformarlos en seres pensantes. 

Una vez más, no se trata de darle a los estudiantes el objetivo número tal del programa de lenguaje donde se le explica qué es la metáfora y ponerlos a escribir dos o tres; se trata de que utilice ese recurso literario para explorar el mundo y su mundo.